El aumento del impuesto ABL: cosecha magra, rédito político negativo

El aumento del ABL enfrenta al nuevo Gobierno de la Ciudad con los vecinos, en particular los sectores medios y altos cuyas propiedades tributan montos elevados por su superficie y por estar en zonas donde el nuevo porcentual es más alto (teóricamente hasta el 250%). Hemos visto en estos días a contribuyentes de zona norte, por ejemplo, exhibir boletas de ABL con subas de hasta el 400%. Si bien el análisis de cada caso terminará por corregir errores administrativos, lo cierto es que para el nuevo gobierno resulta muy negativo que la gente diga en cámara: “Si hubiera sabido que iba a hacer esto no lo votaba”.

Macri justifica la medida en función del atraso de las valuaciones fiscales de los predios sobre las cuales se calcula el porcentual a pagar, pero desde la oposición replican que el cálculo debe hacerse “casa por casa” para evitar arbitrariedades. Dicen también que los inquilinos terminarán pagando los mayores costos, estacionar en cocheras será más caro y que los aumentos tendrán un efecto inflacionario en general. Ante lo cual es más racional aplicar aumentos escalonados en el tiempo. También argumentan que los boletos de colectivos y trenes tenían varios años de no haberse movido, sin embargo los aumentos decretados ahora por el gobierno nacional no exceden el 30%.

Macri ha declarado que no habrá marcha atrás. En el siglo XVI, Maquiavello recomendaba al Príncipe atender el “pensamiento de la plaza pública” antes que los rumores que circulaban en los pasillos del Palacio. No ceder en este caso no es un rasgo de firmeza sino de sordera. Debería tomar nota además de los medios de comunicación. Ni siquiera los que lo apoyaron en la campaña están a favor.

Además, los 400 millones de pesos adicionales que recaudaría la Ciudad no son una cuestión de vida o muerte, representan apenas el 3,5% del presupuesto global de más de 11 mil millones de pesos para el año que se inicia. Por lo tanto una solución sencilla esque en el 2008 se aplique la mitad de los aumentos previstos y postergar el resto para el 2009. Anunciar que, entretanto, se estudiarán las valuaciones caso por caso. Llegado 2009 Macri podría dar un golpe de efecto anulando los aumentos generales y reemplazándolos por los que surjan del estudio particularizado.

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